miércoles, 30 de diciembre de 2009

MI BITACORA M.E.B. U.P.N.

La educación a lo largo del tiempo en México ha padecido de muchos problemas en diferentes ámbitos, pero la lucha de los maestros por cambiar este sentido ha sido en su mayoría encomiable y trascendental para abatir el analfabetismo que hasta la fecha existe.



Vivimos fechas de progreso y la educación tiene que modernizarse y entregar buenas cuentas a la sociedad, pero el principal cambio después de analizar las lecturas (La aventura de ser maestro, el docente y directivo y la experiencia) creo esta en el docente, el dejar de buscar culpables y tratar de solucionar los problemas con las herramientas que estén a su alcance y explotar al máximo sus virtudes. La identidad profesional tiene que estar inmersa en la labor docente y el ser un profesional al cien porciento como cualquier trabajador que tiene que rendir cuentas eficientes y claras a la sociedad. Y esta no debe basarse en el profesor ideal, por que ese no existe; lo ideal es buscar nuevos métodos o estrategias para mejorar nuestra labor y en pocas palabras actualizarse y convertirse en un maestro de humanidad como explica José Manuel Esteve.



Es cierto que las instituciones hay muchas limitaciones y que la mayoría de los locales donde ejercemos nuestra labor no son adecuados, además de la falta de apoyo en muchos sentidos de la autoridad de nuestras comunidades, la desvalorización de nuestro trabajo, la disfuncionalidad familiar que esta en su máximo apogeo y esto en muchos casos nos causa molestia y frustración. Pero la forma de cambiar esto es convertirnos en líderes de trabajo, sin ansia de protagonismo, en ser agentes de cambio en nuestras instituciones para mejorar nuestro entorno y en muchos casos gestionar para conseguir que las limitaciones con las que contamos sean mínimas y explotemos nuestras fortalezas.



Y el detonante educativo esta en la mentalidad del maestro y a lo menos yo estoy poniendo el ejemplo; por que trato de prepararme e invito a mis compañeros que comprendamos todos que ese el camino para trascender en la vida.



La única exigencia creo que siempre debe estar presente en los maestros; como dice el escritor Carlos Monsiváis y el periodista José Torres los “programas educativos no deben ser sexenales o de moda sino adecuados a nuestros tiempos; efectivos a la vez y que logren su propósito y que concluya sus procesos.”



Las preocupaciones que tenemos los maestros son muy parecidas por ejemplo enlazar los contenidos, la perdida de los valores en la escuela y la sociedad, entregar buenos resultados, etc. Pero ocuparnos y socializar los problemas con nuestros compañeros para solucionarlos y buscar de distintas maneras que todos los actores intervengan podría ser la mejor manera de enfrentarlos.



Finalmente la mayor satisfacción como maestro es obtener que los niños utilicen los conocimientos aprendidos y que en su futuro cuenten con las herramientas necesarias para ser personas productivas y competentes en el medio que se desenvuelven. La valoración del docente esta en nuestras acciones, esas que dejan huella en la sociedad, el convertirse en maestros humanistas.



El ser maestro por el simple hecho de serlo es una gran responsabilidad y a la vez una motivación día a día.

1 comentario:

Nain dijo...

Comparto con usted la idea de seguir preparándose para mejorar nuestro desempeño dentro del aula, demostrar que somos maestros eficaces, que contamos con buenas herramientas y un gran espíritu humano para atender un grupo de niños y/o adolecentes, con diferentes ritmos de actitud y aprendizaje. Además es una gran satisfacción ver reflejadas sus avances, logros y/o triunfos cuando los vemos realizados, saber que nosotros fuimos quienes los preparamos con gran entusiasmo y que formamos parte de sus primeros años en su educación.
También es muy cierto que hoy en día nuestro trabajo ya no es valorado como antes; es lamentable que las cosas estén cambiando para mal pues en muchas ocasiones se nos ha discriminado, ocasionando la decepción en nosotros mismos. Pero debemos continuar siempre adelante y sentirnos orgullosos de ser lo que somos maestros que estamos preparados para entregar buenos ciudadanos a la sociedad.